viernes, 16 de diciembre de 2011

¿CUÁNDO NACIÓ JESÚS?


¿CUÁNDO NACIÓ JESÚS?, por Gabriel Wüldenmar Ortiz

En Occidente celebramos la Navidad el 25 de diciembre, pero hay razones para sostener que la fecha pudo ser otra. Es poco probable que naciera en invierno, ya que no se escogería tal estación para viajar a empadronarse, y menos con María finalizando su embarazo, ni estarían los pastores al raso en una noche invernal con sus rebaños dispersos en la montaña (finales de diciembre y enero son la parte más fría del invierno en Belén, con una media de 2,8 ºC bajo cero), sino que pasarían la noche en las aldeas, con los ganados resguardados (los pastores palestinos siempre recogen sus rebaños de las montañas antes del 15 de octubre; los rebaños en esa zona están al raso entre mayo y septiembre).

Tampoco sería verano, pues, en tal caso, estarían con los ganados en las zonas altas, único lugar con pastos, lejos de los núcleos poblados, por lo que no hubieran podido acudir en breve tiempo a ver al Niño, prontitud que sugiere que estaban cerca de las aldeas. Por todo ello, una fecha primaveral u otoñal parece la más sensata. En efecto, un conjunto de hechos y razonamientos totalmente independientes coinciden en señalar al mes de septiembre para el nacimiento de Jesús. Vamos a verlos:

1) Inmediatamente antes de ser concebido Juan el Bautista, su padre Zacarías era sacerdote de servicio en el Templo en el turno de Abías (Abijah). Había 24 turnos en el año (cada uno con su nombre), de una semana de duración cada uno. La primera semana empezaba con el primer mes (Nisan) a principios de la primavera. Después de seis meses, el orden de turnos se repetía. Así, cada sacerdote servía dos veces al año durante una semana cada vez, y luego, durante tres semanas más (Pascua, Shavuot y Tabernáculos), servían todos conjuntamente.

El turno de Abías era el octavo en orden, o sea que, según el cómputo de las semanas, era entre el 27 Iyar y el 5 Sivan, o sea entre el 1 y el 8 de junio. Era el que le correspondía a Zacarías, el padre del Bautista. Después, Zacarías tuvo que permanecer otra semana más de servicio porque la siguiente era Shavuot. Pero en cuanto cumplió su ministerio (15 de junio) regresó a su casa, que no podía estar a más de 50 km de Jerusalén (un par de días de viaje), y días después su esposa queda encinta.

Nueve meses después nació Juan el Bautista, al principio de la primavera siguiente, y como Jesús era seis meses menor que Juan (recordemos en todos estos cálculos la gran precisión histórica de Lucas), tenemos que Jesús nació a mediados de septiembre, probablemente ya en el otoño, cuando la fiesta anual posterior a la siembra se unió al censo para colapsar la pequeña infraestructura de hospedaje de Belén (vecina a Jerusalén, centro de la fiesta).

2) Tres meses después de formalizar un compromiso matrimonial hebreo (lo que nosotros llamaríamos un noviazgo formal), se formalizaba el primer matrimonio (lo que nosotros diríamos “estar prometidos” o “petición de mano”) que tenía lugar en el mes de septiembre. Después de este primer matrimonio se permitían las relaciones sexuales pero sólo en la primera mitad de diciembre. La razón de esto era asegurarse de que si era engendrado el Mesías, éste nacería en septiembre, mes de la expiación. De hecho, si la novia no quedaba en cinta, las relaciones sexuales eran aplazadas hasta el diciembre próximo, y así sucesivamente hasta el segundo matrimonio.

Naturalmente esta norma dejaba de tener valor a partir de la celebración del segundo matrimonio o matrimonio definitivo (nuestro matrimonio religioso). Así pues, si el Mesías era concebido después del matrimonio primero pero antes del matrimonio segundo, como ocurrió en el caso de María, se esperaba que naciera en septiembre. Esto se debe a que el nuevo año empieza en otoño, con la fiesta de los Tabernáculos, celebrando al Señor como Rey (ser el Rey era una cualidad del Mesías), lo que en algunos ambientes era considerado como “el Día (de la venida) del Señor”.

3) La estrella de Belén, o sea la triple conjunción Saturno-Júpiter, tuvo lugar en tres fechas, el 29 de marzo, el 29 de septiembre y el 4 de diciembre. Demasiado temprana la primera y demasiado tardía la última, pero la de septiembre encaja perfectamente con la hipótesis presentada sobre el nacimiento del Mesías.

4) La entrada de Jesús en Jerusalén, signo profético de la llegada del Mesías, se produjo en septiembre, pues sólo en ese mes los judíos tendrían palmas para recibirle.

5) Si usamos el cómputo cronológico sirio que emplea Lucas y que resulta comprobadamente útil para fechar el momento exacto de la muerte de Jesús, el nacimiento de Éste debe situarse entre el 1 de octubre del 7 a JC y el 30 de septiembre del año 6 a JC.

Ocurriese en la fecha en que ocurriese, la venida de esta Luz Eterna que nos fue regalada desde Lo Alto es el acontecimiento más grandioso de la Historia, pues en nuestra pequeñez e imperfección, nos ha visitado el Amor mismo hecho carne. Gloria a Dios en los cielos y paz a las gentes de buena voluntad. Feliz Navidad a todos.

(Más informción en:http://lacasadelasabiduria.com/obras.php)