jueves, 21 de mayo de 2015

QUIÉN ESTÁ DETRÁS DEL EJÉRCITO ISLÁMICO (ISIS)

QUIÉN ESTÁ DETRÁS DEL EJÉRCITO ISLÁMICO (ISIS)
Por Gabriel Wüldenmar Ortiz

El EI (ISIS), siglas correspondientes a “Estado Islámico”, es una organización terrorista musulmana ultrafanática conocida por sus brutales comportamientos: ejecuciones arbitrarias masivas por decapitación, sometimiento de mujeres y niñas a esclavitud sexual, genocidio contra las minorías -cristianos, chiíes, yazidíes o kurdos-, destrucciones de ciudades, etc. Muy bien armada y entrenada, su finalidad declarada es crear un califato islámico en Oriente Medio, especialmente en Irak y Siria. En realidad, esa caterva de criminales irracionales es muy útil para los planes de EE.UU. e Israel, porque les permite: 

a) Continuar con la “satanización” indiscriminada del islam ante la comunidad internacional (obteniendo así respaldo para su tesis del “choque de civilizaciones”, que tan buenos recursos petrolíferos les ha reportado a los estadounidenses y sus aliados; la teoría del “choque de civilizaciones” quiere presentar estas guerras como un enfrentamiento entre culturas y religiones, cuando, en realidad, es una guerra por motivos estratégicos y económicos). 

b) Contar con un pretexto para mantener sus intervenciones militares en Irak en tiempo de paz y mantener a raya a la verdadera insurgencia. 

c) Bombardear territorio e infraestructuras de su enemigo Siria, al que sólo la protección rusa le libró de ser invadida. 

d) Crear un clima mundial de miedo y paranoia (obsesionado con el terrorismo y la seguridad interior) que justifique intervenciones armadas en otros países, retrocesos en las libertades civiles y en los Derechos Humanos, y la imposición de un estado policial militarizado con amplios y arbitrarios poderes sobre la población. El que cuestione la legitimidad de la “guerra contra el Terrorismo” es considerado terrorista y sometido a las leyes anti-terroristas, lo que permitirá, finalmente, perseguir cualquier tipo de disidencia ideológica (para ello bastará asociarla con el terrorismo).

No creamos que se trató de un aprovechamiento circunstancial. Todo fue planeado. Así, los estadounidenses, mientras bombardeaban al EI (ISIS), les suministraban armas en secreto. Los mismos kurdos se han sorprendido ante el hallazgo de armas estadounidenses e israelíes en manos de los miembros del EI (ISIS). Fuerzas chiitas que luchan contra el EI (ISIS) en Irak, y miembros del propio ejército iraquí han denunciado muchas veces que los terroristas del EI (ISIS) reciben ayuda militar de EE.UU. Por ejemplo, las tropas iraquíes de Al-Hashad Al-Shabi derribaron en Al-Bagdadi (región de Al-Anbar, Irak, 26-2-2015) un helicóptero estadounidense cargado de armas para el EI (ISIS)[1]

La semana anterior, el jefe del Comité para la Seguridad Nacional y la Defensa, del Parlamento de Irak, Hakem Al-Zameli, denunció que helicópteros estadounidenses, que participaban en la supuesta operación de bombardeo contra el EI (ISIS), estaban en realidad suministrando armas y víveres a dichos terroristas al sur de Tikrit (Irak). Efectivamente, de cara a la opinión pública internacional, EE.UU. y la OTAN bombardea a estas brutales milicias con la excusa de la “guerra contra el terrorismo”. Pero la manifiesta ineficacia de esta campaña es sospechosa. Los bombardeos estadounidenses y aliados tienen como objetivos reales la infraestructura económica de Irak y Siria, incluyendo sus fábricas y refinerías de petróleo.

Wesley Clark, comandante supremo aliado en Europa de 1997 a 2000, confesó en una entrevista de televisión[2] que EI (ISIS) fue un montaje de los estadounidenses para combatir a Hezbollah, el enemigo de Israel: “El Estado Islámico comenzó a través de la financiación de nuestros amigos y aliados (…) Si se requiere a alguien que luche a muerte contra Hezbollah, se busca a fanáticos y fundamentalistas. Solo ellos pueden lidiar contra Hezbollah”. 

Por su parte, el profesor Michel Chossudovsky, economista canadiense y director del Centro de Investigación sobre la Globalización, en Montreal, declaró que el EI (ISIS) era inicialmente una rama de Al-Qaeda creada por la inteligencia de EE.UU. con el apoyo del MI6 Británico, el Mossad Israelí, los Servicios de Inteligencia de Pakistán y la Presidencia General de Inteligencia de Arabia Saudita (GIP, Istikhbarat). Según este experto, el EI (ISIS) ha apoyado a los insurgentes contra el gobierno sirio de Bashar Al-Assad durante la guerra civil de Siria. Añade que la OTAN y el Estado Mayor de Turquía fueron los que contrataron a los mercenarios de ISIS y Al-Nusrah para desequilibrar al gobierno sirio (desde marzo de 2011). 

Chossudovsky cita informaciones de la Inteligencia israelí, publicadas en la web DEBKA, donde se reconoce la existencia de “Una campaña para reclutar a miles de voluntarios musulmanes en países de Oriente Medio y el mundo musulmán para luchar junto a los rebeldes sirios. El ejército turco aloja a estos voluntarios, los entrena y asegura su entrada en Siria”. Chossudovsky señala que Israel ha apoyado a las brigadas de EI (ISIS) y Al-Nusrah en los Altos del Golán, en su lucha contra el gobierno sirio y contra Hezbollah. Añade que los terroristas yihadistas se han reunido regularmente con oficiales de las Fuerzas de Defensa Israelíes (FDI) y con el primer ministro Netanyahu. Algunas fotografías muestran a este criminal visitando y dando la mano a mercenarios de la guerra de Siria que estaban recuperándose de sus heridas en hospitales israelíes. El alto mando de las FDI reconoce: “elementos de la yihad global dentro de Siria, miembros de ISIS y Al-Nusrah, son ​​apoyados por Israel”.

Es más: Chossudovsky afirma que hay miembros de las fuerzas especiales occidentales y agentes de inteligencia occidentales en las filas del EI (ISIS), y que estos asesinos fueron entrenados por miembros de las Fuerzas Especiales Británicas y del MI6 para luchar en Siria. Añade que especialistas militares occidentales, contratados por el Pentágono, han entrenado a los terroristas en el uso de armas químicas. De hecho, una cadena de información estadounidense[3] reveló que “Los EE.UU. y algunos aliados europeos están utilizando a contratistas de defensa para entrenar a los rebeldes sirios sobre cómo asegurar los arsenales de armas químicas en Siria, según informó un alto funcionario de EE.UU. y varios diplomáticos de alto nivel a la CNN”.

Según Chossudovsky, los terroristas del EI (ISIS) en Siria trabajan a las órdenes de los aliados occidentales y tienen instrucciones de sembrar el caos en Siria e Irak. De hecho, existen fotos del senador republicano (derechista) estadounidense John McCain reunido cordialmente con líderes terroristas en Siria. El profesor Chossudovsky señala también que el proyecto de ISIS de crear un califato forma parte de los proyectos de EE.UU., que pretende dividir Irak y Siria en territorios separados (un califato islamista sunita, una república árabe chiita y un Kurdistán independiente).

Todo esto significa que EE.UU., sus aliados europeos e Israel son los verdaderos criminales responsables de las brutalidades y desmanes de los terroristas del EI o ISIS. Es increíble que EE.UU. y sus aliados digan combatir al terrorismo cuando es evidente que ellos lo fomentan, organizan y financian. De hecho, las brutales decapitaciones realizadas por estos terroristas forman parte de los programas de entrenamiento patrocinados por la CIA en Arabia Saudita y Qatar, y su finalidad es causar pavor y conmoción. Es significativo que muchos de los criminales reclutados por el EI (ISIS) eran presos condenados (algunos a muerte) en las cárceles de Arabia Saudita, aliado de Occidente. Este país los liberó y reclutó para unirse a las brigadas terroristas.

Más información en: "Lo que no se cuenta sobre la Historia Contemporánea" http://goo.gl/wcYc7T